Hoy, dentro de la serie iniciada con «Dejar de Reencarnar – Parte 2» (y que debe verse antes que este artículo y vídeo), quiero mostrarte como vida tras vida tus traumas y su carga aumenta.
Quizás la idea de que te cargas de traumas, vida tras vida, te sea difícil de aceptar. De hecho, hay una vieja teoría, que dice que cuando vienes a la vida, dejas atrás aquellas cosas que ya no te sirven.
Sin embargo, esa vieja teoría, como otras, ya están superadas, porque el trabajo con Regresiones a Vidas Pasadas nos muestra lo contrario: Que no los dejas ahí, en el perchero de la entrada, antes de iniciar una nueva vida, sino que están presentes en tu vida.
Piénsalo… Si así fuera, las Regresiones carecerían de sentido. Y de ser cierto, eso sólo lo sería si fueras absurdamente masoquistas, porque se puede observar que un trauma no sólo afecta a la vida posterior a la cual se originó, sino a múltiples vidas posteriores, limitándote, creándote problemas, sufrimiento…
En Vuelo a la Libertad o el sinsentido del Karma abordé por primera vez esta realidad, que tu vida no es el resultado de algún hecho del pasado por el que pagas, o un aprendizaje a realizar, sino por cómo has interpretado ese hecho.